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Actividades Delegaciones

Un año más, el parque acuático Aquavelis
   recibe a Fundación AFIM de Málaga

 El pasado 13 de julio, un grupo de 21 usuarios de Fundación AFIM junto con tres monitores pasaron una gran
jornada en el Parque acuático Aquavelis, situado en la localidad malagueña de Torre del Mar. Se trata de un clá-
sico en esta delegación de Málaga, ya que llevan muchos años visitándolo por estas fechas, “aunque no por ello
resulta menos apetecible para todos ellos, ni se apaga la ilusión que todos mantienen con esta actividad”, comen-
ta Pepi Rando, delegada de Fundación AFIM en Málaga.

 Casi dos meses antes de este “gran día”, los chicos comienzan a preparar la fecha ideal para que puedan acudir
el mayor número de personas, “ya que tenemos que cuadrar que no tengan citas médicas, que no estén enfermos,
que no se hayan ido ya de vacaciones y consultar con el Parque Acuático para que no sea un día muy saturado de
gente y podamos estar cómodos”, prosigue la delegada.

 El día comienza con la recogida en la furgoneta adaptada de los chicos con movilidad reducida y con la cita en
la parada del bus para el resto de chicos que, con Toñi, monitora de talleres de Fundación AFIM, esperan la hora.
 Son 35 kilómetros de distancia de Málaga al Parque, “pero, desde luego, las caras de felicidad, las risas y las bro-
mas es lo que más se escucha”. En el viaje se sientan al final del autobús para ir juntos y poder comentar y hasta
cantar alguna que otra canción. Y no faltan las consabidas preguntas: “¿te has puesto la crema protectora?”,” ¿y
tú qué llevas de comer? o ¿por qué cacharro te vas a tirar primero?

 “Sí me gustaría resaltar que a pesar de que los tres monitores no dejamos en ningún momento de estar atentos
a lo que puedan necesitar, es espectacular la ayuda que se prestan unos a otros”, comenta Pepi Rando. “Se repo-
nen la crema, comparten alimentos, comparten hamacas, ayudan en la entrada a las piscinas, van juntos a tirarse
por las atracciones, nos tomamos el café o el helado juntos”.

 Y por esta colaboración y empatía merece la pena repetir la experiencia. “Creo que simplemente por observar y
valorar todos sus desvelos, vale la pena el esfuerzo y la responsabilidad que ponemos los monitores, que al final
si se compara, queda en la mera presencia y supervisión”.

 Y toca el regreso a casa. ¿Tristes? ¿Aburridos? Todo lo contrario, “y como siempre se escuchó innumerables
veces la frase de todos los “Aquavelis”: “¡Pepi, tenemos que venir más!”

Y esta misma Pepi no quiere despedirse de este Aquavelis 2017 sin expresar “MI MÁS SINCERA GRATITUD A

TODOS LOS CHICOS, A SUS FAMILIAS QUE NOS LOS CONFÍAN, A MIS COMPAÑEROS QUE LO HACEN POSIBLE Y

AL PERSONAL DE AQUAVELIS QUE SIEMPRE NOS LO PONE FÁCIL”.

¡Hasta el próximo año!  7
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